lunes, 20 de agosto de 2018

Dos mujeres (Sage femme, 2017)***

Dir: Martin Provost
Int: Catherine Frot, Catherine Deneuve, Olivier Gourmet, Quentin Dolmaire, Mylène Demongeot, Pauline Etienne, Audrey Dana, Marie Paquim.

Duelo de actrices: La vida en estado puro.           

"Mujer prudente”, sería la traducción literal del título original francés de esta producción posibilitada gracias a la alianza de France 3, Curiosa Films y Versus en 2017 que llega ahora a nuestras pantallas (afortunadamente también en V.O.). El título elegido para España se apoya de manera evidente en las dos mujeres protagonistas del filme, a la sazón dos grandes actrices. Una de ellas, Catherine Deneuve, la gran dama del cine francés. Un mito viviente que ha trabajado con directores de la talla de Jacques Demy, Roman Polanski, Agnès Varda, Luis Buñuel, François Truffaut, Marco Ferreri, Jean Pierre Melville, Robert Aldrich, Tony Scott...y podríamos seguir hasta que se nos secase la garganta. Respecto a Catherine Frot, es cierto que ni por edad, ni por filmografía, puede compararse su trayectoria con la de la Deneuve, pero su camino dentro del cine francés (de la mano de directores como Cédric Klapisch, Xavier Giannoli, Francis Veber o Denis Dercourt), la ha consolidado como una actriz muy a considerar dentro del cine galo actual. 



Dos mujeres nos narra una historia dual pero partiendo de la primera de ellas, Claire (Catherine Frot), una comadrona solitaria, seria y con carácter, que ama su oficio, su soledad y su independencia por encima de todo, pero que ve como el mundo que ella ha conocido (como le ocurre a muchas personas que han alcanzado la cincuentena) está cambiando hacia algo que no le gusta. De repente, a su ordenada vida llega Béatrice (Catherine Deneuve), una antigua amante de su padre, ya fallecido, rebelde y caótica, que contrasta frontalmente con ella y revoluciona su día a día. Como le ocurría a Don Quijote y a Sancho Panza, ambas sufren (como bien apuntó el especialista Martín de Riquer), una fagocitación, aunque en este caso, la “quijotización” que sufre la realista Claire por parte de la idealista Béatrice, es mucho mayor que la posible “sanchificación” de ésta por parte de la eficaz comadrona.



Dos mujeres es, por tanto, una película de eminente peso femenino (aunque también hay hombres, en especial en la vida de Claire, encarnados por el hijo y el amante casual de ésta). Un filme en el que este duelo de personajes femeninos se plasma en el duelo interpretativo de las actrices que encarnan la Frot y la Deneuve. La historia, aunque dramática, se nos narra por parte de Martin Provost (su sexto trabajo) con la habitual elegancia y sensibilidad a que nos tienen acostumbrados los directores y directoras franceses. Provost ya nos ha mostrado otros excelentes retratos femeninos en Séraphine (2008), El vientre de Juliette (2003) o Violette (2013). No en vano, el cine es un arte visual que ellos crearon de la mano de los hermanos Lumière, y en el caso del buen cine francés (que también lo hay malo, como en todos lares), no cabe duda de que la veteranía es un grado. 

Dos mujeres no es un tipo de cine para quien busque adrenalina y devorar palomitas. Ese público sufrirá lo indecible con este otro cine que apuesta por una visión  intimista, que nos narra historias vitales, que nos hace reflexionar sobre el paso del tiempo y sobre nuestra propia vida. Porque eso es lo que hace y lo que logra tanto este filme, como otro reciente estreno de la directora Agnés Jaoui que será analizado en breve en mi próximo artículo (Llenos de vida/Place publique en Francia), y que les adelanto que me ha gustado igual o más que éste de Provost. 

Tengo que confesar que, desde siempre, me ha encantado el cine francés, tanto en su faceta del tratamiento del género negro (que ellos también inventaron con el “cinema noir”), como en las inteligentes comedias y dramas que directores ya míticos como François Truffaut, Godard, Bresson o el gran Claude Chabrol, han plasmado con multitud de obras maestras imprescindibles para entender este séptimo arte que llamamos cine. 

Si les gustan las historias humanas narradas con sensibilidad, inteligencia y calidad artística, sin duda disfrutarán con estas “dos mujeres”. Y es que, a veces, es bueno pararse y degustar un cine que permite tomarse un tiempo para la reflexión. De adrenalina y comedias insulsas y estúpidas ya va sobrada la cartelera veraniega.

Gonzalo J. Gonzalvo

-Palafox- 

No hay comentarios: