viernes, 2 de febrero de 2018

Call Me by Your Name (2017)****

Dir: Luca Guadagnino
Int: Timothée Chalamet, Armie Hammer, Michael Stuhlbarg, Amira Casar, Esther Garrel, Victoire Du Bois

Elio Perlman (Timothée Chalamet), un joven de 17 años, pasa el cálido y soleado verano de 1983 en la casa de campo de sus padres en el norte de Italia. Se pasa el tiempo holgazaneando, escuchando música, leyendo libros y nadando hasta que un día el nuevo ayudante americano de su padre llega a la gran villa. Oliver (Armie Hammer) es encantador y, como Elio, tiene raíces judías; también es joven, seguro de sí mismo y atractivo. Al principio Elio se muestra algo frío y distante hacia el joven, pero pronto ambos empiezan a salir juntos de excursión y, conforme el verano avanza, la atracción mutua de la pareja se hace más intensa. 

De este siciliano, nacido en Palermo en 1971, y activo como director desde 1997, sólo había visto la prescindible Melissa P. (2005), con María Valverde, la inquietante Yo soy el amor (2009), de la mano de la no menos inquietante Tilda Swinton, y Cegados por el sol (2015), remake de la francesa La piscine (1969), de Jacques Deray. A pesar de que todas ellas tienen detalles que indican que Guadagnino tiene personalidad y buen gusto, nada hacia indicar que alcanzara la belleza y perfección narrativa que tiene Call Me by Your Name



Tomando como punto de partida la novela homónima de André Aciman, el ilustre y veterano James Ivory ha escrito un guion que recuerda, por cierto, su añorada y delicada Maurice (1987), en la que junto a Kit Hesketh-Harvey adpataban la novela de E. M. Forster. La época cambia, pero el idílico paisaje italiano (ahora Cremona, Bergamo y otras localidades de la Lombardia italiana) vuelve a ser el marco en el que se desarrolla la "love story" de Elio y Oliver.



Luca Gaudagnino se ha dejado seducir por la belleza de la juventud y de los paisajes, por la antiguedad clásica (el padre de Elio es un especialista en arqueología), las piezas de música clásica, que ocupan al mismo Elio (que estudia piano) y que inundan su vida de sugerentes impulsos sensuales. En la casa de Elio, se habla indistintamente de arte, arqueología , literatura y política en inglés, italiano, francés, hebreo o alemán. Todo parece ser posible. 

Para completar las sensaciones, Luca Guadagnino hace que la banda sonora se complete con temas de Sufjan Stevens, Franco Battiato,  The Psychedelic Furs, Ryuichi Sakamoto, John Adams, Bach, Satie, Ravel y muchas canciones de moda (cantables y bailables de los 80) que logran, junto al director de fotografía tailandés Sayombhu Mukdeeprom (habitual de Apichatpong Weerasethakul), trasadarnos a un territorio de ensueño más deseado que naturalista, pero en el que de vez en cuando, conviene perderse. Esa es la propuesta que nos hace Guadgnino.



Luca Guagnadino, con todas esas herramientas y el buen trabajo de todo el reparto (en especial la pareja Timothée Chalamet-Armie Hammer) ha logrado seducirnos a todos los demás. Más allá de la defensa de una relación homosexual, la historia habla de la magia de los primeros amores, casi inesperados, y tan necesarios para entender que somos mucho más que simples bestezuelas dispuestas a consumir lo que sea..., que el amor sigue siendo uno de los principales combustibles de la creatividad, de la vida...

Por cierto, verla doblada es un riesgo innecesario. Los que han  sufrido su ridículo doblaje nos recomiendan la versión original con subtítulos.


Roberto Sánchez

-Aragonia-

1 comentario:

Inma dijo...

Completamente de acuerdo con tu visión de la película. Me pareció una obra preciosa, yo tenía la sensación de estar pasando por diferentes cuadros impresionistas. Los protagonistas geniales, transmiten con la mirada todos sus sentimientos y te hacen simpatizar con la historia del descubrimiento juvenil, amor de verano, primer amor, y desengaño amoroso. Para mí una gran obra!