lunes, 25 de febrero de 2019

Green Book (2018)****

Dir: Peter Farrelly
Int: Viggo Mortensen, Mahershala Ali, Iqbal Theba, Linda Cardellini, Ricky Muse, David Kallaway, Montrel Miller, Harrison Stone, Mike Young, Jon Michael Davis, Don DiPetta, Mike Hatton, Dimiter D. Marinov, Craig DiFrancia, Gavin Lyle Foley, Randal Gonzalez, Shane Partlow.

El universal lenguaje d la amistad

Green Book lleva acumulados unos cuantos premios y nominaciones en 2018. Aquí van, para aquellos que les gusta 
recordar los diversos galardones:


Premios Oscar: 3 premios (mejor película, mejor actor secundario y mejor guion original) de 5 nominaciones. 
Globos de Oro: Mejor película comedia, guion y actor de reparto (Ali). 5 nominaciones
Premios BAFTA: Mejor actor de reparto (Mahershala Ali). 4 nominaciones
Festival de Toronto: Premio del Público (Mejor película)
National Board of Review (NBR): Mejor película y actor (Mortensen)
American Film Institute (AFI): Top 10 - Mejores películas del año
Critics Choice Awards: Mejor actor secundario (Mahershala Ali). 7 nominanciones.
Asociación de Críticos de Chicago: Nominada a Mejor actor secundario (Ali)
Satellite Awards: 5 nom. incluy. mejor comedia, director y actor (Mortensen)
Sindicato de Productores (PGA): Mejor película
Sindicato de Directores (DGA): Nominada a mejor director/película
Sindicato de Guionistas (WGA): Nominada a Mejor guión original
Sindicato de Actores (SAG): Mejor actor secundario (Mahershala Ali) 

Green Book (últimamente parecen estar de moda los títulos originales en inglés), hace referencia a un libro, de color verde que, hasta bien entrados los sesenta, recogía establecimientos “aptos” para los viajeros negros en Estados Unidos. El tema del racismo y de la lucha de los negros en USA por sus derechos civiles, ha sido relevante en títulos como la excelente Arde Mississippi (Alan Parker, 1988), las biografías de Malcolm X (Spike Lee, 1992) y de Martin Luther King, con la reciente Selma (Ava DuVernay, 2014) como último biopic sobre el carismático pastor y activista político de color. 



Entre el drama, la comedia y la temática político-social se mueve este filme que, sorprendentemente, ha sido dirigido por Peter Farrelly, cuya filmografía está plagada de títulos como Dos tontos muy tontos (1994), Vaya par de idiotas (1996), Amor ciego (2001) o Dos tontos todavía más tontos (2014), todas ellas comedias de humor zafio y ramplón bastante justitas en cuanto a calidad. Farrelly, algo herido en su amor propio, ha debido pensar que ya era hora de hacer algo en el cine que le diera algo de trascendencia a su carrera, y se ha embarcado en una mezcla de géneros que, aunque la comedia sigue siendo su puntal más sólido, combina ésta con el drama. Incluso, algunas secuencias, recuerdan al cine de mafiosos al estilo de Uno de los nuestros o Una historia del Bronx, y el acento y forma de hablar de un italo americano del Bronx de Nueva York (que en versión original borda el actor Viggo Mortensen), hace que sea mucho más recomendable su visionado en V.O.S.E que doblada. 



Mortensen es, desde luego, lo mejor y más destacado del filme, y sobre él pivota el peso de la película, a pesar de que el nominado Mahershala Ali, también brilla a gran altura y podría decirse que es uno de esos actores queaunque nominados en ese apartado de actor secundario es en realidad un segundo protagonista "tapado", que lógicamente se ha "robado" el Oscar.



Green Book, con todos estos mimbres (a lo que se añade una ambientación muy cuidada, y una estupenda banda sonora de música de los cincuenta y sesenta), logra un resultado conjunto más que notable, que, además, funciona a nivel narrativo, con una cuidada dirección por parte de Farrelly que, repito, con este trabajo, parecía estar decidido a mostrar su talento de una vez por todas. La soledad y aislamiento del diferente, del ser creador y sensible, queda patente también gracias a la recreación de la vida del virtuoso pianista de color Don Shirley, antítesis de ese rudo Tony Lip (al que da vida de manera magistral, Mortensen). Shirley se erige en una especie de Pigmalion que intentará educar y “afinar” en lo posible al bruto de Tony, que a pesar de todo, tiene un corazón de oro y adora a su mujer y a sus hijos. Lip, con su naturalidad desprovista de convenciones sociales, inculcará en Shirley el placer por vivir de forma políticamente incorrecta y salvaje. Como dice en un momento al elegante pianista de color: “Cuando se come, se come, cuando se ríe, se ríe...”, hay que hacer las cosas de verdad y con ganas...y si hay que comer algo con las manos para disfrutarlo...pues eso...manos a la obra. Esto descoloca a Shirley, pero como hombre muy inteligente que es, comprende finalmente que la vida es un equilibrio entre ambas filosofías, y que hay que sacarle el máximo jugo. 



Julia Roberts en Pretty Woman inculcaba esta misma filosofía vital al magnate de los negocios encarnado por Richar Gere, que en una escena disfruta de la vida en un parque público quitándose los zapatos y sintiendo la hierba bajo sus pies. Don Shirley, atrapado en un limbo (no es lo suficientemente blanco ni lo suficientemente negro en su forma de vivir, como dice él mismo), encorsetado por la falta de libertad política, social y sexual, podrá sentir esa “hierba fresca” bajo sus pies gracias a Tony, que cambiará su forma de ver la vida, creándose entre ambos un vínculo de amistad que, en la vida real, se mantendría hasta la muerte de ambos. 

Esta historia real de amistad, entre dos hombres tan diferentes, que recrea Green Book es el vivo ejemplo de lo bien que funcionan este tipo de historias en el cine. Ejemplos de ello tenemos en filmes de corte similar como Paseando a Miss Daisy (Bruce Beresford, 1989), que se hizo con cuatro Oscar; o la más reciente Aprendiendo a conducir (Isabel Coixet, 2014), en la que una escritora de Manhattan a punto de separarse y un taxista hindú de la casta Sij (estupendos Patricia Clarckson y Ben Kingsley). 

Hay, en todo el filme, una amargura existencial de fondo que remite, en su esencia, a las agridulces comedias vitales del maestro neoyorquino Woody Allen. Quizá él hubiese logrado un resultado superior, aunque el trabajo de Farrelly es muy notable, y el guion (en el que ha participado el auténtico Nick Valellonga, Tony “Lip” Valellonga en la película) es sólido, bien construido, y funciona de principio a fin.

GONZALO J. GONZALVO

-Aragonia, C. Grancasa, Palafox, Puerto Venecia, Yelmo-

2 comentarios:

Roberto Sánchez dijo...

Esta película estaba diseñada para obtener el Oscar y ha funcionado. Para mi gusto "Green Book" es un producto que se consume gratamente y que tiene dos soberbios trabajos actorales (Mortensen y Ali) y poco más...Bueno, las suficientes dosis de "corrección política" y un lenguaje cinematográfico absolutamente vulgar. Decidir que es mejor película que la "Roma" de Cuarón es simplemente ridículo...Premiar a Cuarón tan solo con La mejor película de habla no inglesa, como mejor director y mejor fotógrafo es reconocer veladamente que es muy superior al "Libro Verde", del "flojito" Farrelly (Pedro)...

En Hollywood siguen haciendo de las suyas...

G. J. Gonzalvo dijo...

Así son los Óscar...pero The green boik" es, de largo, el mejor trabajo de Farrelly...Y quizá Viggo Mortensen se debería haber llevado el Óscar...